sábado, 8 de agosto de 2009

Mis días en Africa II


En el comentario de Maribel a Mis días en Africa preguntaba que apodo tenía yo en la mili. Lo tenía en secreto pero, como me cae muy bién esta chica, se lo voy a decir. El....., no es un panda, no tiene guión ¿Quién era yo? Eeeese mismo.

Para hacer honor a tal apodo había que comportarse como tal, y cuando preguntaron quien sabía mecanografía nadie dijo ni mu por miedo a terminar en la cocina pelando patatas o limpiando los servicios, pero el menda levantó la mano, y derechito a la oficina.

Me encomendaron hacer el orden del día, los estadillos, en fin , cuatro cosillas. Con mis dos deditos buscando las letras en el teclado pasaron unas horas, y el sargento muy intrigado entró sigilosamente como gato a la caza del ratón. De repente una voz grave y potente detrás de mí me sobresaltó. Así que mecanógrafo, ¿eh?. Me miró, se quedó pensativo y dijo:
"Bien, bien, sigue practicando".

No sé si el sargento era buena persona o se acobardó ante mi presencia. ¿Apodo merecido?